¿Se puede conducir con audífonos?

De acuerdo a lo establecido en el Reglamento de Circulación, aquellas personas que cuenten con discapacidad auditiva podrán obtener un permiso de circulación y, por tanto, renovarlo, si reúnen las aptitudes psicofísicas requeridas para la clase de permiso de conducir que solicite.

La Dirección General de Tráfico (DGT), en base al apartado 2 del Anexo IV del Real Decreto 2272/1985, de 4 de diciembre por el que se determinan las aptitudes psicofísicas que deben poseer los conductores de vehículos, establece dos niveles de índice de pérdida auditiva combinada (IPC) para los dos grupos de permisos (profesionales y normales).

Para el grupo 1 (AM, A1, A, B, B+E y LCC) no debe existir una pérdida de audición combinada entre los dos oídos de más del 45%, con o sin audífono. Mientras tanto, para el grupo 2 (BTP, C1, C1+E, C+E, D1, D1E, D, D+E) esta no debe sumar más del 35%. Para obtener estos datos se realizará una prueba de audiometría. 

Sin embargo, esta audiometría no es el único requisito. Aquellos conductores que cumplan con los parámetros mencionados deberán también contar con un mecanismo compensatorio para potenciar otras áreas sensoriales durante la conducción como por ejemplo la visión. La DGT también establece que estos conductores con discapacidad auditiva no deben sufrir alteraciones del equilibrio permanentes evolutivas o intensas de origen otológico o de otro tipo como el vértigo, la inestabilidad o los vahídos.